La Revista Escaparate entrevista en este número al doctor Serkan Aygin. Junto con el doctor Nicolás Pérez, en sus manos está en la vanguardia europea del tratamiento capilar más efectivo que se conoce. Un repaso a la apasionante vida de un profesional de origen turco con prestigio internacional.
¿Cómo nació su pasión por este trabajo?
Cuando comencé la universidad en el año de 1985, mi vida social estaba muy enfocada en el aspecto de mi cabello. En esa época no existía ningún tratamiento específico para el cuidado capilar a excepción de los remedios caseros parecidos al Minoxidil el cual utilizábamos para dar volumen a nuestro pelo. Desde ese tiempo se comenzaba a aplicar tratamientos en el cabello para así también no solo dar forma a nuestro cabello, sino a forma a nuestra vida social y psicológica. Aquello se volvió obsesión. Tras terminar la carrera, me especialice en enfermedades dermatológicas y, a su vez, orienté mi interés en el tema capilar.
Desde que he comenzado mi carrera, el interés principal ha sido el cabello. Con el tiempo fueron apareciendo tratamientos para este como el trasplante capilar quirúrgico. Así me encuentro hoy realizando trasplantes capilares como un profesional especializado en cirugía dermatológica.
¿Cómo es el día a día del Dr. Serkan?
Sinceramente, un día en mi vida es bastante monótono ya que soy una persona muy adicta al trabajo desde los últimos 15 o 20 años. No me quejo de esta situación y tampoco me esfuerzo por cambiarla. Al contrario, sigo en mi trabajo con más pasión y tenacidad de los primeros años.
Por esta razón, no puedo tener tiempo para mí mismo ni para mi vida social. Hasta los sábados trabajamos todo el día. Y los domingos trabajo entre tres y cuatro horas aproximadamente para hacer consultas. Todo esto es para mantener el funcionamiento y para conservar la calidad de nuestro servicio. Mi vida está muy enfocada al trabajo, empezando desde las ocho de la mañana y acabando a las nueve o diez de la noche. Estoy contento de esta situación, no me quejo. Quiero seguir trabajando de esta forma mientras mi salud lo permita.
Entonces, ¿cómo compagina el éxito laboral con su vida diaria y familiar?
En nuestro país, generalmente, los médicos hacen jornadas intensas y suelen ser abnegados. Se podría decir que nosotros hacemos más horas de jornadas trabajadas que nuestros colegas europeos. En realidad, yo también trabajo más horas extras que un especialista normal por la carga laboral y porque no me gusta dejar las cosas a medias. Por eso tengo mucho trabajo, tanto en la oficina como en la clínica, sumado a que entre tres y cuatro noches semanales tengo un programa en el que realizo valoración de casos clínicos que los pacientes me solicitan. Aquí, el gran apoyo es mi mujer. Trabajamos juntos el hacer horas laborales con ella durante todo el día y contribuye mucho en mí psicológicamente. Todo esto nos da la oportunidad de poder programar mejor y tomar decisiones más racionales gracias al unir la vida familiar con la vida laboral. Vincular esas dos vidas nos ha funcionado.
En el ámbito geográfico, ¿qué ha significado para Turquía este avance internacional nacido desde en su tierra?
Desde el año 1970, Turquía tuvo muchos avances, no solo en el campo físico sino también y, especialmente, en el ámbito de salud (personal médico). En Turquía se han formaron muchos médicos talentosos y valiosos especializados en diferentes campos. Especialmente, en los últimos años de los noventa e inicios del 2000, se formaron médicos muy exitosos en el campo de la estética. En el caso personal, tuve muchas oportunidades de practicar y experimentar en el campo de la estética y de trasplantes capilares porque, desde entonces, los turcos están abiertos al entendimiento de la cultura oriental enfocada al ramo de la estética. Cuando comenzamos a realizar trasplantes capilares con la técnica FUE en el año 2007 no teníamos ningún paciente europeo. Este trabajo comenzó mayormente con los pacientes turcos y los interesados en la cultura oriental como en los países de Qatar, Líbano e Irán. Con ello, tuvimos muchas oportunidades de practicar más y tener una mayor experiencia de forma rápida. Con toda la práctica y experiencia obtenida, tuvimos más reputación y creamos una clínica importante de trasplante capilar en Europa o los Estados Unidos de América. Con el tiempo, la gente se dio cuenta de esto y de cómo promovíamos el trabajo. Los pacientes europeos y americanos comenzaron a llegar a nuestra clínica y a nuestro país, especialmente por las intervenciones realizadas con la técnica FUE. En nuestra clínica se formo un ambiente en el que los pacientes árabes, turcos, americanos, europeos y de todo el mundo vienen y se hacen la intervención. También, comen juntos en un restaurante y conversan entre ellos. Esta información se ha ido trasmitiendo de boca en boca y así se dio a conocer el gran éxito que tiene Turquía en el campo de trasplante capilar. Los pacientes europeos y americanos han dado referencias sobre nosotros. Es un gran honor para nosotros que los pacientes europeos y americanos elijan a Turquía para el trasplante capilar.
¿Cuál es el futuro en el implante capilar desde la perspectiva de un experto como Dr. Serkan?
Si pensamos en el injerto capilar como un término general (la realidad de trasplantar el cabello natural que tiene una persona en una zona donde no tiene) seguirá hasta siempre. Podemos decir que la demanda de trasplante capilar nunca se terminará e incluso aumenta cada día.
El número de personas que pierden el pelo se aumenta cada vez más por circunstancias de la vida. También la gente está más informada sobre estas. El injerto capilar crece rápido en todo el mundo. En términos generales, no existe ningún otro tratamiento que pueda reemplazar al trasplante de pelo. Así que nada podrá reemplazar el injerto de pelo, ni el uso de peluca o prótesis capilares ni una terapia alternativa, ni un tratamiento con una tecnología avanzada.
Por ejemplo, si se intenta desarrollar una tecnología que pueda clonar el pelo pero por ahora no hay otra solución, excepto el trasplante capilar. Sabemos que hay novedades e innovaciones sobre los dispositivos para tener un injerto más natural y más denso. Nosotros las seguimos para hacer satisfacer a nuestros pacientes y, también, a nosotros mismos. Incluso, con las condiciones actuales, tenemos resultados muy satisfactorios. Estamos a punto de hacer casi perfecto nuestro nivel de satisfacción y lo seguimos intentamos con mucho esfuerzo. Hay novedades como los robots para trasplante de pelo. Los robots son solo una parte de este trabajo. En este sentido, lo más importante sería desarrollar la mano del robot y hacerle obtener una habilidad equivalente a la mano humana. Si las empresas invierten en mejorar estas técnicas, los robots podrían hacer el trabajo equivalente a la mano humana dentro de una o dos generaciones.
Con ello, ¿qué nuevas técnicas en el sector tiene preparada Dr Serkan?
En Turquía ya se terminó el clásico procedimiento quirúrgico convencional (Fuss) hace muchos años. Estamos observando que este procedimiento desaparecerá en Estados Unidos y en Europa. Nosotros empezamos con la técnica FUE (extracción individual de unidades foliculares) en el año del 2007 y, desde hace mucho tiempo, seguimos utilizando esta técnica. Especialmente, en los últimos diez u once años, estamos siguiendo todas las innovaciones y las aplicamos. Nos especializamos en el injerto capilar con la técnica DHI (Direct Hair Implantation). Un método que todavía no se conoce mucho en Europa, pero sí que es una técnica que nos asegura tener mejores resultados. A casi todos nuestros pacientes aplicamos las técnicas combinadas de FUE y DHI, a veces solamente la DHI. De esta manera logramos resultados más perfectos. Pero, con esto, sigue existiendo en el tema capilar una desventaja: observamos que las terapias utilizadas (en forma de soluciones o de pastillas) para mantener el cabello existente o para apoyar el trasplante capilar, se están desarrollando muy lentamente. Siendo sicneros, no se puede llegar el mismo nivel en las terapias capilares como en el trasplante. Por ejemplo, las terapias como el PRP, luz de laser o mesoterapia, no pueden proporcionar una protección 100% al cabello. Las personas podrían necesitar hacerse una segunda intervención si se llegarán a caer el cabello con el tiempo. La otra desventaja es que siguen sin aprobarse referencias comunes para clonar cabello.
¿Cómo están desarrollando su trabajo con la pandemia del Covid-19?
Las salas de operaciones en el centro médico quirúrgico clínica se construyeron según el concepto de las salas quirúrgicas con los filtros HEPA y las lámparas con ultravioleta C. Estas incorporaran esas medidas, independientemente de Covid. Así que esos lugares están esterilizados. En segundo lugar, en las oficinas, donde nosotros tenemos más contacto con los pacientes, trabajamos con mascarillas, viseras y ropa de protección. También minimizamos el riesgo de contagiarnos. Defino a los pacientes antes de ser operados para saber si están sanos o no. Esto es muy importante. El estado va a hacer test a los viajeros en los aeropuertos, pero nosotros seguiremos nuestro propio protocolo de testeo. Estamos haciéndolo con los pacientes turcos y haremos lo mismo con los pacientes internacionales. En tercer lugar, en cuanto al hotel donde se alojan. En este caso, en ellos solamente se quedan nuestros pacientes. Ningún otro que no sea nuestro no puede quedarse en ese hotel. Las habitaciones y el servicio del hotel tienen las medidas de seguridad máximas. Además, el personal que trabaja en el hotel, como todo nuestro personal, periódicamente se hacen tests. En las operaciones, lo más importante es la esterilización ambiental. Desde antes del Covid, con la ayuda de los filtros HEPA y las lámparas con ultravioleta C, se lograba purificar el ambiente de todo tipo de microorganismos. Esto sigue así. También, ya se sometieron a test todo nuestro personal, incluso los choferes, antes de empezar a trabajar con los pacientes turcos. Cada 20 días o cada 3 semanas, repetiremos el test periódicamente. Este proceso seguirá así durante la pandemia. En tercer lugar, aceptaremos a los pacientes que no se habían hecho test antes. Aunque lo hubieran realizado en su país o en el aeropuerto, seguiremos nuestro protocolo de test. No permitiremos que los pacientes corran riesgos.
Texto y fotos: Javier Comas