Sevilla conmemora en 2020 los 400 años de su máximo exponente devocional, el nazareno que llegó al convento del Valle en 1620 y que hoy es el gran foco de rezos que tiene la ciudad en San Lorenzo.
La imagen fue encargada por la hermandad del Mayor Dolor y Traspaso que residía en el antiguo convento del Valle, ahora Santuario de Los Gitanos. Realizada en madera de cedro con la peana en pino de segura, «de una medida ligeramente superior al natural, distorsionada por el efecto de su posición, sacrificio auténtico del cánon escultórico en virtud de la exaltación del dinamismo y realismo», como señalan los expertos; está completamente tallada, con los brazos articulados para disponerlos entorno a la cruz o maniatarlos para traslados y su anual besamanos. «Está policromada, con múltiples lagunas históricas en el rostro, asemejando la piedad popular su aspecto doliente, acrecentado con el tiempo, con el de un ser humano».
Y es que «El Señor es una imagen de su tiempo, una escultura moderna en toda la extensión del término, pues es evidente reflejo de las doctrinas para la creación de las obras de
Hoy, y desde 1703 cuando se trasladó a su actual barrio, el Señor del Gran Poder recibe el rezo de sus devotos que van a diario a San Lorenzo. Desde 1965 ya preside su Basílica, epicentro de los viernes en Sevilla. Para este año, la hermandad ha querido conmemorar estos cuatro siglos con un programa de actos y cultos que llevan al Señor a los barrios más pobres de la ciudad. En mitad de un Año Jubilar que arrancó el 23 de noviembre, esta Semana Santa ausente no verá en sus calles al Gran Poder. Pero, al llegar octubre, la imagen cruzará la ciudad para buscar a sus devotos en misión.
La exposición
Por su parte, del 31 de enero al 8 de marzo, la hermandad planteó un viaje por su tiempo e historia, con el Señor como eje central. La Fundación Cajasol acogió entre sus renovadas paredes, los cuatro siglos de una imagen que esculpió Juan de Mesa hace 400 años pero que la hizo Sevilla. El Señor es un icono devocional al que hay que contemplar desde múltiples aristas, desde el culto a la cultura. Desde el patrimonio a los altares y las convocatorias, pasando por un cartel publicitario, una crónica periodística, un capote de paseo, el vuelo de un avión o un galeón de la Carrera de Indias. Todo esto que a priori parecía deslavazado pero mantenía un hilo conductor que mostraba a la ciudad un itinerario para comprender la fuerza del Señor a lo largo de los siglos. Bajo el título «Gran Poder. Mesa te esculpió, Sevilla te hizo. 400 años de devoción», la muestra ha superado todo tipo de récords en la exposiciones cofrades alcanzando los más de 70.000 visitantes.
El Señor será trasladado a Tres Barrios el 17 de octubre en misión evangelizadora. Desde ese día hasta el 7 de noviembre, como cuentas de un rosario, el Nazareno permanecerá en las parroquias de la Blanca Paloma, las Candelarias y Santa Teresa hasta el 6 de noviembre. Ese día, regresará en andas acompañado por los fieles de esos barrios hasta la Catedral. Al día siguiente, tras una misa estacional y matutina en el templo metropolitano volverá a la basílica en procesión extraordinaria, ya en su paso, por la tarde. Sevilla tendrá en otoño una nueva oportunidad de ver al Señor en las calles.