Con motivo del fallecimiento de la señora Duquesa de Osuna, recuperamos con cariño la entrevista que nuestro director tuvo el honor de hacerle allá por el año 2009.
Descanse En Paz.
Texto: Mario Niebla del Toro.
Fotos: Aníbal González.
Si la profesión de periodista tiene algunas ventajas, una de ellas es la de conocer a personas interesantes. Es el caso de la Duquesa de Osuna, nueve veces Grande de España. Tras casi dos años de insistencia de un servidor y con la ayuda de, mi ya amiga, la Duquesa de Medina de Rioseco, tercera hija de nuestra entrevistada de este mes, consigo la entrevista de la última Téllez-Girón. La de Osuna llegó a ser la Casa nobiliaria más importante de España, aglutinando en la persona del Duque de Osuna los Ducados de Arcos, de Béjar, de Benavente, de Gandía, del Infantado , de Medina de Rioseco, de Pastrana, de Plasencia, de Uceda, de Lerma, de Estremera,de Francavilla, y de Mandas y Villanueva. Hasta trece ducados que fueron ostentados junto con doce marquesados, trece condados y un vizcondado… Por ello y por su vida, tan repleta de experiencias y sabiduría, hablar con la Duquesa de Osuna es hablar con la propia Historia de España. Doña Ángela María Téllez-Girón y Fernández de Córdoba ostenta uno de los cuatro títulos más importantes de España, junto al de Medina-Sidonia, Alba y Medinaceli. Nada amiga de las cámaras, la Duquesa de Osuna nos recibió sin embargo con una generosa familiaridad en el trato, en el patio de su palacio sevillano, con una temperatura admirable en pleno mes de julio, lugar donde las horas parecen pasar sin prisas. Para entonces, ya nos tenía preparada una rica limonada a modo de bienvenida. Una maravilla de tarde y de Señora. Gracias.
¿Qué ha supuesto para la Señora Duquesa de Osuna todas las dignidades que sus antepasados le han legado?
Siempre me he sentido muy orgullosa de todo lo que gira en torno a nuestra familia. En otros aspectos me ha dado igual. No he tenido un excesivo interés, al contrario, he repartido primero entre mis hijas y después en la familia entre los que han querido casi todos los títulos. He repartido a cada hija una gran Casa. Siempre he considerado que la historia de España es muy amplia y muy rica. Entonces, quedaba un poco confuso que títulos tan importantes que yo llevaba se quedasen un poco, entre comillas, subyugados por el de Osuna, ya que mi título matriz es el de Osuna al ser la última Téllez-Girón. El Duque de Arcos, por ejemplo, fue la única tierra feudal que hubo en Andalucía con Medina-Sidonia, lo tiene mi hija mayor y para mí es muy importante. Ducado de Plasencia, son los extremeños Zúñigas, también importantísimo que se lo he cedido a mi hija la segunda. Duque de Uceda, hijo del Duque de Lerma, importantísimo…Por ese lado, siempre he sentido un gran orgullo.
¿Cómo ha influido en la vida de la XVI Duquesa de Osuna ostentar esos títulos? ¿De qué manera le ha condicionado?
Cuando he tenido la obligación de ejercer de Duquesa de Osuna lo he hecho, cuando no he sido Ángela María.
¿Dónde pasó la niñez una de las grandes damas de la Nobleza?
Entre el palacio de mis abuelos y el castillo que tenemos en Córdoba, en Espejo. Como mi padre murió cuando yo tenía ocho meses, mi madre se vino a vivir al palacio de mis abuelos y yo con ella. Tengo muchos y muy buenos recuerdos de mi niñez. En la escuela no tuve más remedio que ser una buena estudiante porque lo primero que me decían era que era mi obligación, aunque era pequeña y no lo entendía (sonríe).
Tengo entendido que vive a caballo entre Madrid y Sevilla, ¿Qué le gusta de Madrid y de Sevilla?
De Sevilla todo, lo que yo llamo Sevilla, fuera no me parece Sevilla…En Madrid, con todos mis respetos, vivo porque mis hijas están casadas allí, sino no saldría de Sevilla.
Todavía se recuerda cómo la Señora Duquesa cosía a mano el manto de su Virgen de las Aguas del Museo durante toda una noche de cada Semana Santa hasta cuajarlo de joyas ¿cómo recuerda su etapa de Camarera de Honor de la Virgen?
Aquello era maravilloso. Todas las señoras de Sevilla prestaban sus joyas para que los luciera la Virgen. Fuicamarera de la Virgen de soltera y luego de casada. Durante una noche nos poníamos mi madre y yo a coserle el manto. Mi madre se ponía en el suelo y yo en el paso con la Virgen y, cuando estaba terminada, llamábamos a los hermanos para que la vieran. Lo estuve haciendo hasta hace nada porque, cuando nos fuimos a Madrid, pusieron a otra camarera.
¿Cómo ha cambiado aquella Semana Santa hasta la actual?
Es muy difícil de explicarlo. La Semana Santa la he visto en la silla de la Carrera Oficial, en un balcón, en la calle, de todas las maneras y siempre, ahora y antes, me ha encantado. Yo iba con mi madre y las amigas, no había más remedio, a ver las salidas y entradas de cofradías siempre con mucha prisa por llegar a ver las más importantes. El Gran Poder ha sido siempre otra de mis grandes devociones. Mi abuelo, el Marqués de Villapanés, era muy del Gran Poder, y quizás por él nos viene esa devoción al Señor. Siempre la he visto auténtica.
Y Sevilla, ¿cómo era aquella ciudad con respecto a ésta?
Las dos son bonitas. Las épocas van cambiando…Antes lo que se llamaba la gente de Sevilla éramos como una gran familia, luego vino mucha gente de fuera, que es lógico, y todo cambió.
Creo que además de haber sido una mujer muy guapa, que aun salta a la vista, ha sido una bailaora de flamenco fetén y que el cante no se la ha dado nada mal, algo que contrasta con lo que representa su persona…
Es usted muy amable. No he sido nada extraordinaria, lo que sí es cierto es que me ha encantado siempre el flamenco como a muchas sevillanas les ha encantado. Soy una de tantas. Lo que menos me gustaban eran las bulerías. El flamenco antiguo me gustaba escucharlo solamente. Recuerdo el cante de mis tíos, mis abuelos… ahí, yo calladita. Las alegrías es lo que más me ha gustado.
¿Qué es para la Duquesa de Osuna la verdadera Nobleza?
La que sabe serlo y comportarse como tal.
¿Qué es para Doña Ángela María lo más importante que tiene la vida?
Mis hijas y mis nietecitos, que ya van colándose… (sonríe) y mi biznieta que también tengo. Me gusta la vida, mi familia, Sevilla…Me siento muy sevillana como verá.
¿Cómo ha evolucionado la sociedad según la Duquesa de Osuna?
En unas cosas encuentro que muy bien, en otras no la entiendo. No me atrevo a decir en esto o en lo otro porque no soy quien debe decirlas. Como una española más, le digo que la que yo viví me gustaba más, aunque no debo estar descontenta con esta.
En la Casa de Osuna las buenas maneras y los buenos modales han sido a lo largo de la Historiaconocidos por la disciplina y la exquisitez con la que se ha cuidado ¿Es difícil conservar esos modos en tiempos en los que lo vulgar está tan presente?
Los buenos modales es lo menos que se puede exigir a una persona. Dentro de lo que cabe, creo que manteniendo una serie de principios y reglas sí es fácil. Pienso que eso sale de dentro. Cada uno sabe por él mismo lo que debe de hacer en cada momento. No hace falta ni mencionarlo.
¿Qué le apasiona a la Duquesa de Osuna?
Ir a Gandía, me encanta. Uno de los títulos que tiene la Casa de Osuna, que ese no lo he cedido por devoción, es el de Duque de Gandía, porque viene del Gran Duque de Gandía San Francisco de Borja, que al ser un santo lo conservo con mucho apego. Lo tengo con devoción. Me apasiona su historia.
Son conocidas en la Nobleza sevillana las fiestas que ha dado en su palacio, ¿qué es para la SeñoraDuquesa una fiesta perfecta?
Modestias aparte, el estilo nuestro es muy bonito y como las que se hacen en Sevilla no me gusta ninguna. En las nuestras no sólo cantan los cantaores, también nosotros cantamos y bailamos. Siempre debe ser familiar que es lo más importante que debe tener una fiesta, la familiaridad, y la participación de los invitados en ella.
Veo en su casa muchos retratos de los Reyes y del Conde de Barcelona, ¿qué opinión tiene de la FamiliaReal Española?
Tiene un mérito que la gente no les reconoce. Yo ejerzo de Duquesa de Osuna a veces. Ellos son Familia Real desde que se levantan hasta que se acuestan. Un día estando con la Reina le vi ojeras y muy mala cara y le dije “Señora, qué mala cara le veo a Su Majestad” y me respondió “Ángela María, es la séptima visita que recibo hoy y estoy agotada”. Parecen que no hacen nada. El Gobierno es otra cosa y de eso no tengo nada que opinar yo. Yo a los Reyes los admiro. A Don Juan lo quisimos mucho. Venía a fiestas que hacíamos en el patio de esta casa, siempre encantador.
PERFIL
¿Un libro favorito?
Me encanta la poesía de mi primo Rafael de León. Además de ser primos, le tengo auténtica veneración. Soy una apasionada de las canciones y los poemas de Rafael de León. Nos entendíamos muchísimo. Era muy gracioso. Me llegó a componer una copla a mí con mi nombre.
¿Un plato?
El gazpacho.
¿Un color?
Hay varios, según para lo que sea. Me encantan los colores vivos: el verde, el rojo…Lo que más me gusta es el amarillo y el colorado, los colores de nuestra Bandera de España.
¿Una canción?
Una alegría o una sevillana.
¿Un día de la semana?
El lunes, porque ya puedo empezar a trabajar.
¿Un día de su vida?
Cuando nacieron mis hijas.
¿Un día del año?
La nochebuena, porque nos reunimos toda la familia.
¿Un lugar?
El campo.
¿Una ciudad?
¿Qué pregunta es esa? (sonríe).