“No vendemos inmuebles, vendemos fuentes de ingresos”
En un sector tan competitivo como el inmobiliario, donde las promesas a menudo se venden más rápido que los activos, MAPESA Inversiones se ha ganado un espacio a base de algo tan simple, en ocasiones escaso, como la confianza. Antonio Mateos, su fundador y CEO, no empezó su carrera entre ladrillos y rentabilidades, sino en el ejército, donde aprendió que el rigor, la estrategia y el compromiso no son cualidades opcionales. Hoy, esa filosofía impregna cada operación de su consultora, especializada en inmuebles comerciales en rentabilidad, una firma que ha conquistado el respeto de inversores exigentes y grandes patrimonios gracias a un método propio y una atención boutique que huele más a sastre que a agencia.
Desde su cuartel general en Sotogrande, pero con presencia efectiva en todo el país, MAPESA ha demostrado que no hace falta una oficina en Madrid para operar con eficacia nacional. En esta entrevista, Antonio Mateos nos abre las puertas de un modelo de negocio poco convencional y muy efectivo, donde no se venden inmuebles, sino fuentes de ingresos; donde cada cliente recibe una estrategia a medida, y donde el verdadero activo no es un local comercial, sino la confianza construida a base de transparencia y resultados.
¿Cómo nace MAPESA y qué le motivó a fundar una consultora tan especializada desde el Campo de Gibraltar?
MAPESA surge en 2006, cuando aún era suboficial del ejercito y detecté una gran falta de rigor en las intermediaciones inmobiliarias. Mientras todos miraban al residencial, yo me enfoqué en locales y suelos comerciales, buscando aportar valor real: transparencia, información veraz y presentaciones profesionales. La empresa nació para ayudar a invertir sin humo ni promesas vacías, con un trato cercano y honesto.
Después de 17 años de recorrido, ¿cuál ha sido el principal reto para posicionarse entre las 20 mejores consultoras del país?
Ganar la confianza de inversores que están a cientos de kilómetros de distancia en un sector saturado e intrusivo. Lo logramos con transparencia, compromiso y una filosofía boutique. No somos los más grandes, pero sí los más fiables. Operación a operación, construimos una marca sólida basada en el compromiso y la constancia.
¿Qué diferencia a MAPESA de una inmobiliaria tradicional?
Solo trabajamos con activos comerciales en rentabilidad. Además, aplicamos nuestro Método Excellent, un sistema propio que planifica cada paso y evita imprevistos. No vendemos inmuebles, vendemos fuentes de ingresos. Ayudamos a grandes patrimonios a proteger su dinero y generar rentas estables. Ellos siempre buscan tener un colchón que les permita seguir manteniendo el mismo nivel de vida en el caso de que su actividad principal falle.
Han anunciado la apertura de una oficina en Madrid este año, ¿qué supone para MAPESA abrir una oficina en la capital del país?
Reflexionando a fondo, entendimos que nuestra verdadera fortaleza es la descentralización y la capacidad de desplazarnos. Nuestro equipo está distribuido por todo el territorio, incluyendo Madrid, y eso nos permite estar donde el cliente nos necesita. No esperamos en una oficina: vamos al cliente. Ese modelo nos permite ser más eficaces y mantener nuestra esencia.
En un sector tan competitivo, ¿qué tiene de especial el Método Excellent?
Es un sistema que protege al cliente desde el inicio creado para evitar las eventualidades habituales en la transacción. Nada se deja al azar: analizamos, planificamos y ejecutamos con precisión. Cada activo tiene una estrategia única. Por eso el 80% de nuestras operaciones se cierran en menos de 60 días. No improvisamos, trabajamos a conciencia con una metodología. No buscamos la fama de una propiedad solo la ven los compradores adecuados.
¿Qué significa ser una consultora “boutique”?
Significa dedicación. No trabajamos en volumen, sino en calidad. Cada cliente recibe una estrategia hecha a medida, como un traje. MAPESA ofrece artesanía inmobiliaria, no catálogos impersonales.
¿Qué perfil tiene su cliente inversor?
Inversores patrimonialistas que buscan asegurar sus ahorros a través de activos comerciales alquilados a los mejores inquilinos del mercado: seguridad, ingresos pasivos y estabilidad a largo plazo. Inversores que quieren construir un patrimonio sólido con activos bien seleccionados y alquilados a inquilinos solventes. Nosotros analizamos muchos activos al día y solo trabajamos con el 10-15% de lo que revisamos.
¿Cómo influye la ubicación en Sotogrande si operan a nivel nacional?
Aunque nuestra oficina central está en Sotogrande, funcionamos como una red distribuida por toda España. Este modelo descentralizado nos permite ser más rápidos, adaptarnos mejor a cada mercado local y estar siempre cerca del cliente. Nuestro equipo está donde hay oportunidades, no encerrado entre cuatro paredes, ya que viajan constantemente para estar donde están nuestros clientes y donde surgen las mejores oportunidades. Tenemos a un consultor a menos de 1,5 horas de cada cliente. Como decimos internamente: tener el equipo descentralizado no es un obstáculo, es una ventaja competitiva.
¿Qué peso tiene la sostenibilidad en sus decisiones de inversión?
Cada vez más. Aunque el inversor privado aún no lo prioriza tanto como el institucional, apostamos por ubicaciones sólidas, rentas equilibradas y activos versátiles. Además, tenemos muy en cuenta criterios ESG, que marcarán el futuro del sector. En MAPESA trabajamos para que las inversiones de nuestros clientes sean estables y resilientes en el tiempo, no solo rentables hoy.
¿Qué consejo daría a los emprendedores que quieren lanzar un proyecto nacional?
Encuentra un problema real donde el mercado sea grande y enfócate en resolverlo. Luego, foco, constancia y perseverancia, incluso cuando todo parezca cuesta arriba. Divide tu gran objetivo en pasos más pequeños y ve a por el poco a poco sin rendirte. Empecé vendiendo bocadillos en el instituto, luego fui militar y ahora lidero una firma con presencia en toda España, aunque aún nos queda mucho por conquistar. La clave es no rendirse nunca.
Texto: Carlota Acuña
Fotos: Ángela Oliva