LA ARTESANÍA COMO EPICENTRO
La Real Fábrica de Artillería abrió sus puertas con una mezcla de memoria, técnica y emoción. Desde el 22 de octubre y hasta el 23 de noviembre de 2025, Sevilla acogió INTERWOVEN, la primera edición de la serie Homo Faber Capsule, una gran exposición internacional que situó a la artesanía contemporánea en el centro de la conversación cultural.
La delegada de Turismo y Cultura, Angie Moreno, durante la inauguración señaló que «Interwoven refuerza esa vocación universal de la ciudad, al reunir piezas de distintos países en un diálogo entre técnicas ancestrales y creación contemporánea».
En un edificio histórico recién restaurado, símbolo del pasado industrial de la ciudad y hoy referente de innovación desde el patrimonio, confluyeron 35 piezas excepcionales creadas por artesanos de 15 países y 22 disciplinas distintas. Todas lo hicieron siguiendo un hilo conductor claro: revelar las interconexiones humanas y técnicas que laten en cada obra hecha a mano.
La delegada de Cultura también ha señalado la relevancia simbólica de la Real Fábrica de Artillería como sede de la muestra al ser «un emblema de la transformación cultural de Sevilla».
Detrás de este proyecto estuvo la Michelangelo Foundation for Creativity and Craftsmanship, junto al Ayuntamiento de Sevilla y la Asociación Contemporánea de Artes y Oficios (ACAO). Su representante, el sevillano Ramón Vergara, fue clave en el aterrizaje de esta iniciativa global en la ciudad.
EL ORIGEN DE UNA IDEA QUE MIRABA A SEVILLA
Para Vergara, la exposición nació de una convicción profunda: “La exposición surge de una idea clara y profundamente cultural: que Sevilla, con su historia, su sensibilidad hacia los oficios y su vocación de encuentro, debía convertirse en el lugar donde una iniciativa internacional como INTERWOVEN encontrara su primer hogar”.
La propuesta no fue improvisada. La ciudad, con su larga tradición artesana, se presentó a una convocatoria abierta que reunió más de 800 candidaturas de artesanos de todo el mundo. De ese caudal de creatividad surgió la selección final, realizada por un jurado internacional compuesto por diseñadores, comisarios, artistas y coleccionistas de prestigio. El resultado fue un mosaico contemporáneo donde dialogaron técnicas ancestrales, materiales inesperados y enfoques innovadores.
Vergara lo explicó con orgullo personal y sentido de ciudad: “Como sevillano, y como representante de la Asociación Contemporánea de Artes y Oficios (ACAO), sentí que era una oportunidad única para situar a nuestra ciudad en el centro del mapa artesanal global”. INTERWOVEN nació, así, desde Sevilla hacia el mundo.
UNA EXPOSICIÓN QUE CONQUISTÓ DESDE EL PRIMER DÍA
Desde el primer día, la exposición ha recibido miles de visitantes, convirtiéndose en uno de los acontecimientos culturales más concurridos de la ciudad en los últimos meses. Las colas que rodearon la Real Fábrica de Artillería se convirtieron en una imagen cotidiana y simbólica: ciudadanos y viajeros esperando descubrir un mundo donde la artesanía se presentó con la potencia de un lenguaje universal.
Este impacto no fue solo artístico o expositivo. Gracias a programas paralelos como Homo Faber Concierge, la muestra impulsó nuevas conexiones profesionales entre artesanos y diseñadores, encargos nacionales e internacionales y colaboraciones inéditas. Fue un ecosistema cultural y económico que se activó en la propia ciudad.
Según la delegada de Turismo y Cultura “INTERWOVEN no es solo una exposición, es una experiencia que conecta a Sevilla con más de 3500 artesanos de todo el mundo”.

LA REAL FÁBRICA DE ARTILLERÍA: ESPACIO, MEMORIA Y PROYECCIÓN
El escenario elegido fue, en sí mismo, parte fundamental del relato. La Real Fábrica de Artillería, un tesoro histórico del siglo XVI, renació como gran contenedor cultural. Tras un proceso de restauración que respetó su esencia industrial, el edificio acogió exposiciones, residencias artísticas, conciertos y proyectos internacionales que devolvieron a Sevilla un espacio monumental y vivo.
La exposición aprovechó esa arquitectura para reforzar su mensaje. Los altos pilares, las naves abiertas y la luz tamizada que caía sobre las piezas transformaron cada obra en un pequeño altar contemporáneo. Como si el edificio, con su pasado de manufactura, reconociera en esos objetos algo íntimamente familiar.
EL ALMA DE INTERWOVEN: UN HUMANISMO HECHO DE MANOS
Cada pieza seleccionada, desde la porcelana experimental hasta la cestería contemporánea, desde las esculturas textiles surcoreanas hasta la orfebrería italiana; reveló esta verdad: detrás de cada obra había un gesto, una tradición, un tiempo entregado.
Pero INTERWOVEN no se detuvo en lo individual. Su fuerza residió también en las conexiones que estableció: “Lo que la hace diferente es su capacidad para mostrar interconexiones culturales: entre regiones, disciplinas, tradición e innovación”, añadió Ramón Vergara.
La exposición demostró que la artesanía ya no es solo preservación del pasado, sino una forma contemporánea de pensar el mundo, de dialogar con otros lenguajes y de crear nuevas narrativas.


UN RELATO GLOBAL CON ACENTO ANDALUZ
Aunque la muestra reunió artesanos de cuatro continentes, la presencia andaluza destacó con nombres que han llevado sus oficios a una dimensión artística internacional. Entre ellos, Francisco Carrera Iglesias con su pieza bordada, Pablo Tito en cerámica, Manuel Solano Rodríguez en bordado de oro o Joaquín Gilabert en cestería. Para los visitantes, estas obras establecieron un puente emocional entre la artesanía global y la identidad cultural de Andalucía. Un diálogo entre lo local y lo universal, entre lo cotidiano y lo extraordinario.
UN PROYECTO QUE MIRA AL FUTURO
INTERWOVEN no fue un evento aislado. Se convirtió en la primera de una serie internacional que viajará a diferentes ciudades del mundo cada dos años, alternando con la gran Bienal Homo Faber, que se celebrará en Venecia en 2026. Pero Sevilla quedará para siempre como su punto de partida.
Según Vergara, “la artesanía une técnica, memoria, creatividad y sensibilidad”. Y quizá por eso esta exposición —nacida en Sevilla, tejida por el mundo— deja la sensación de que aún queda mucho por construir, por entrelazar y por contar.
Asimismo, Angie Moreno ha subrayado, además, que «la artesanía no es solo un legado material, sino una manera de entender el mundo, una práctica que une técnica y emoción. Este proyecto nos invita a mirar más allá de nuestras fronteras sin perder de vista nuestras raíces».
TEXTO: FERNANDO COPETE FOTOGRAFÍA: GERARDO MORILLO




















